Receta de guisantes estofados con bacon
Estos guisantes estofados con bacon son un plato delicioso, perfecto para esos días fríos en los que necesitemos reconfortar el alma y calentar el cuerpo.
Estos guisantes estofados con bacon son un plato delicioso, perfecto para esos días fríos en los que necesitemos reconfortar el alma y calentar el cuerpo. Los guisantes son un básico que quedará de maravilla en casi cualquier preparación, como complemento o eje principal de esta receta. Congelados, de lata o frescos son un acierto tenerlos siempre en la nevera. Los vamos a combinar con unos ingredientes excepcionales que tendrán en el bacon a su abanderado. Pero no estará solo tendrá la ayuda de una increíble morcilla para triunfar. Atrévete a probar estos guisantes estofados con bacon espectaculares.
Ingredientes:
Cómo preparar guisantes estofados con bacon
- Esta receta es sencilla y nos proporcionará un guiso tradicional ideal para el invierno, una cena o comida rápida que nos ayudará a coger fuerzas.
- Nos ponemos manos a la obra con el bacon. Los cortaremos en trocitos del mismo tamaño para que se cocinen a la vez.
- En una sartén con un chorrito de aceite doramos el bacon. Lo retiramos cuando esté en su punto, habrá soltado su grasa a un aceite que nos servirá de base para este plato.
- Pelamos y cortamos la cebolla lo más finita posible. Pochamos la cebolla en el aceite hasta que esté tierna y empiece a ponerse transparente.
- Mientras pelamos el tomate y lo rallamos para que se convierta en la base de un sofrito espectacular. Incorporamos el tomate y dejamos que se cocine con la cebolla 5 minutos.
- Rectificamos de sal y pimienta antes de la llegada de los protagonistas de este guiso, los guisantes. Frescos, congelados o de lata, los salteamos en este mar de sabores impresionantes.
- Añadimos agua o caldo y dejamos que se cocinen durante unos 10 minutos hasta que estén tiernos.
- Con los guisantes en el fuego preparamos la morcilla, la vamos a cortar en rodajas del mismo tamaño para que le den alegría a este plato.
- Ponemos la morcilla y el bacon que habremos reservado. Estos dos ingredientes aportarán el sabor ahumado y el toque de carne que necesitará.
- Tapamos y dejamos que se fusionen todos los sabores durante unos 10 minutos más. Paramos el fuego y nos preparamos para servir esta maravilla.
- Colocamos el guiso en cuencos dando especial prioridad a unos trocitos de bacon y morcilla por persona. Decoramos con un poco de perejil o cebollino picado. Disfrutaremos de un plato completo saludable.
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